Estamos viviendo en una época en la que las opiniones parecen ser irrefutables y un derecho ante todo, me he encontrado con muchas situaciones en el aula que siempre terminan con frases del estilo: «es mi opinión y tengo derecho a decirlo», «puedo opinar lo que quiera porque es un país libre», «es mi derecho opinar»
No me mal entendáis, somos libres de opinar lo creamos correcto pero de pensarlo a decirlo hay un trecho. Muchas veces no hacemos suficiente hincapié en trabajar la empatía en el aula y yo soy la primera que peco de ello. El centro en el que trabajo actualmente ha empezado a trabajar con el tema mediante carteles distribuidos por los pasillos.
Me parece interesante que enseñemos a los alumnos que opinar es estupendo pero tienen que pensar si su opinión va ha hacer daño a otros compañeros o a las personas de su alrededor.
¿Que opináis de la propuesta? ¿Empezaréis a trabajar estos aspectos en el aula?